• Omar Rivera fue juramentado miembro de la Comisión Especial para la Depuración Policial

• APJ y todos sus aliados consideran que este es el momento oportuno para impulsar un cambio

Como parte de la aprobación del decreto de emergencia, para depurar la Policía Nacional se destaca la creación y nombramiento de una Comisión Especial para acompañar en el proceso de depuración y transformación de la Policía.

La creación de esta comitiva que estará presidida por el titular de la Secretaría de Seguridad -Julián Pacheco- está conformada por tres miembros: Omar Rivera, Coordinador de la Alianza por la Paz y la Justicia (APJ), el pastor Alberto Solórzano, representante de la Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH), y la abogada Vilma Morales, actual miembro de la Junta Interventora del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).

Minutos después de su nombramiento, el dirigente de sociedad civil, Omar Rivera hizo énfasis en la importancia de luchar por construir una nueva Policía Nacional que sea efectiva, poderosa y decente “desde la sociedad civil hemos presionado por cambios trascendentales a fin de implementar una verdadera profilaxis que saque las manzanas podridas de los diferentes organismos policiales, reforme la estructura institucional de la Policía Nacional y fortalezca las capacidades de respuesta inmediata, investigación criminal y control del delito”.

“Participar de esta Comisión Especial para la Depuración Policial es una formidable oportunidad para, no solamente incidir, sino que ejecutar directas acciones para evaluar, investigar y certificar a los diferentes miembros de la Policía Nacional; con fuerza vamos a contribuir, no solamente a separar a los que no cumplen a cabalidad con el perfil de idoneidad y demuestran ser confiables, sino que también colaboraremos a identificar a los buenos agentes de escala básica y altos oficiales que pueden, con esmero y responsabilidad, revitalizar la gestión policial y de esta manera contribuir a reducir los elevados niveles de criminalidad y delincuencia en el país” agregó.

Rivera reconoció que son más los buenos policías y son muchos más los buenos hondureños y hondureñas que, vistiendo el uniforme policial, están dispuestos cumplir su deber, sin embargo destacó que “debe comprenderse que la lucha por depurar la Policía Nacional no podrá lograrse sin el decidido apoyo de los entes contralores del Estado como el Tribunal Superior de Cuentas (TSC) e instituciones operadoras de justicia como el Ministerio Público (MP) y el Poder Judicial; es una responsabilidad compartida entre todos los altos funcionarios que constituyen el liderazgo del aparato estatal”.

Finalmente el coordinador de la APJ puntualizó que no se puede seguir tolerando la acción criminal de quien está llamado a combatirla “no se puede seguir permitiendo que se bañe de sangre nuestras calles como consecuencia del proceder de los perversos policías, ni se puede dar lugar a quienes manchan con lodo el uniforme policial. Esta es la hora del cambio, es el preciso momento de la transformación; es ahora o nunca. Todos los sectores estamos en sintonía, no podemos fallar, no podemos fallarle a Honduras”.