Aunque Tegucigalpa y San Pedro Sula ya no figuran entre las ciudades más violentas del mundo, lucha contra la criminalidad no debe detenerse
- Tegucigalpa y San Pedro Sula ya no están entre las 10 ciudades más violentas del mundo, de acuerdo a ranking del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal.
- La APJ ha señalado la necesidad de reformar y fortalecer el sistema de seguridad y justicia del país.
Tegucigalpa. Por primera vez en los últimos cinco años, ninguna ciudad hondureña se encuentra entre los primeros puestos de la terrible lista de ciudades más violentas del mundo, emitida por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal.
A diferencia de 2015, cuando Tegucigalpa y San Pedro Sula aparecían en los primeros puestos del ranking de muertes, en 2017 se registró un descenso importante en la tasa de homicidios.
“En 2016 en San Pedro Sula se registró una tasa de 112.09 homicidios por cada 100 mil habitantes, pero en 2017 fue de 51.18: una baja del 54.34% en un año. De este modo la urbe pasó de la tercera posición en el ranking en 2016 a la 26 en el de 2017 (y ocupó el primer lugar mundial en los años 2011 a 2014)”, detalla el informe.
Por otra parte, en 2016, Tegucigalpa registró una tasa de 85.09 homicidios por cada 100 mil habitantes, pero en 2017 se redujo a 48, lo que equivale a una reducción del 43.59% en un año. Con ello pasó de la posición cuarta en el ranking de 2016 a la 35 en 2017.
Y es que la tasa bajó favorablemente en Honduras de 60.02 en 2015 a 59.05 en 2016 y a 42.8 en 2017.
Pero, ¿qué hay detrás de esta reducción?
El estudio del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal destaca una “pronunciada y rápida disminución de los homicidios en las ciudades de Honduras”, como resultado de acciones estatales.
“Estas reducciones extraordinarias no ocurrieron por casualidad, sino que son el resultado de un encomiable esfuerzo del gobierno de Honduras por erradicar en forma sistemática a células de grupos criminales, reducir la impunidad y actuar contra los delitos, distintos a los homicidios, que cometen las pandillas, así como poner orden en las prisiones”, apunta el estudio.
De las 50 ciudades enlistadas, 15 están en Brasil, 12 en México, cinco en Venezuela, cuatro en Estados Unidos, tres en Colombia, tres en Sudáfrica y dos en Honduras. Además, una ciudad en: El Salvador, Guatemala, Puerto Rico y Jamaica.
El listado del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal lo lidera la ciudad mexicana Los Cabos, con una tasa de homicidios de 111.33, seguida de Caracas (111.19) y Acapulco (106.63).
Lo que sigue
Para Alberto Solórzano, presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH) – organización miembro de la Alianza por la Paz y la Justicia (APJ), la disminución en las tasas de homicidios “es una noticia que alegra, ya que por mucho tiempo San Pedro Sula y Tegucigalpa fueron señaladas como lugares más complicados para vivir. En relación a la violencia que estaba imperando, alegra el saber que se ha logrado salir de ese espacio, pero también esto significa que se debe de continuar mejorando y no conformarnos con lo hecho”.
En ese sentido, Omar Rivera, coordinador de Incidencia de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), señaló que un factor determinante en la reducción de homicidios “es el esfuerzo porque existieran instancias de coordinación en los distintos operadores de seguridad del país, de defensa y justicia, a esto se le suma la dotación de recursos por parte del Estado para lograr esto”.
A criterio de la APJ, los resultados alcanzados deben servir de impulso para continuar y no detenerse en la lucha contra la criminalidad.
Desde su creación en 2012, la plataforma ciudadana de la Alianza por la Paz y la Justicia (APJ) ha venido demandando del Estado un efectivo proceso de reforma y fortalecimiento al sistema de seguridad y justicia del país, a fin de reducir los elevados niveles de violencia e impunidad que benefician al crimen organizado y la delincuencia común.